Leer es una de las habilidades más esenciales que los niños aprenden a una edad temprana. Aunque a muchos adultos les cuesta leer, apreciar y comprender las palabras, muchos niños siguen luchando por dominar esta habilidad. Por ello, muchos padres temen que su hijo no pueda seguir una carrera de lectura o educación. Sin embargo, esto no es así. En la actual era digital, en la que la tecnología es omnipresente y accesible en cualquier momento y en cualquier lugar, es mucho más difícil que los niños se abstengan de leer materiales en sitios web, aplicaciones móviles o libros para empezar a leer. Éstos están disponibles las 24 horas del día, los 7 días de la semana, e incluso se puede acceder a ellos sin ninguna supervisión paterna añadida. Afortunadamente, hay algunas formas sencillas en las que usted, como padre, puede ayudar a su hijo a convertirse en un mejor lector.
Reservar tiempo para leer –
Reserve un tiempo regular y no estructurado para la lectura. Puede ser los fines de semana o durante el horario escolar, pero asegúrese de que no sea una tarea para usted ni para su hijo. Aunque usted desee leer durante su tiempo libre, su hijo también debería poder disfrutar de los libros por igual. Durante este tiempo, lea libros que le gusten a su hijo. Si no le gustan ciertos géneros o autores, ofrezca opciones para que su hijo pueda explorar otros géneros o autores. Muchos niños disfrutan leyendo libros de no ficción sobre cosas que les gustan, como animales, mascotas, comida, etc. La lectura debe ser una actividad divertida y atractiva, así que intenta encontrar momentos que sean fáciles de disfrutar para ambos.
No dude en jugar con la imaginación de su hijo mientras lee.
Mientras lee, deje que su hijo juegue con su imaginación utilizando diferentes palabras y frases que tengan que ver con cosas que le gustan a usted o que a su hijo también le gusten. Evite que lea cosas que a usted no le gusten o que a usted no le gusten. Esto sólo dificultará el proceso de lectura para ambos. En su lugar, permita que su hijo cree su propio mundo utilizando palabras y frases relacionadas con las cosas que le gustan o que usted hace. Pedirle que describa las cosas que ve o que pruebe lo que puede hacer yendo a diferentes lugares o poniendo las cosas en sus propias palabras también ayudará a tu hijo a desarrollar una gran imaginación.
Deje que su hijo decore su propio texto –
Mientras lee, deje que su hijo añada sus propias palabras al texto que está leyendo. Por ejemplo, su hijo puede escribir una o dos palabras en la hoja volante de un objeto sobre el que esté leyendo. O haga que su hijo ponga palabras alrededor de las imágenes del artículo que está leyendo. Esta es una forma sencilla de sumergirse en un tema, pero también puede ser una gran oportunidad para practicar la impresión y la escritura.
No dude en ofrecerle palabras de ánimo mientras su hijo lee.
Aunque la lectura debería ser una experiencia estimulante y agradable, a algunos niños les puede resultar difícil leer porque se sienten solos, desmotivados o incluso tienen miedo de leer. La lectura también puede ser un pasatiempo solitario, sobre todo si su hijo es el único de la casa que tiene un libro. Pedirle a su hijo que le lea a usted u ofrecerle palabras de aliento mientras lee le ayudará a sentirse más aceptado y escuchado, incluso si sólo está leyendo para sí mismo.
Conclusión
La lectura es una habilidad esencial que todo el mundo debería ser capaz de completar a la edad de 5 ó 6 años. Sin embargo, para muchos niños es una destreza que se produce de forma tardía y sólo adquiere importancia durante la adolescencia.